Roberto S?nchez se hizo m?dico porque quer?a escuchar de cerca el coraz?n de la gente. Su dedo pasa del calor de una cavidad hueca al fr?o del bistur?, a pulsar la tecla que provoca el llanto, que provoca la risa, que provoca la tranquilidad. Igual te hace una nota para que el cardi?logo te adelante un ecocardiograma, que te escribe un poema en el reverso de un parte de defunci?n, que te receta una dosis de esperanza cada 24 horas o te prescribe evitar...