The Rise and Fall of the Nicaraguan Revolution

The fall of the Nicaraguan revolution was neither inevitable, nor caused by the lack of political consciousness of the workers and farmers who had made that revolution, neither was it caused by those same workers "voting with their stomachs" in 1989. No, it was the leadership of the Sandinista National Liberation Front ( FSLN ) and its policy of " concertación", of catering to the domestic capitalists of the city and the countryside that demoralized the working people, without gaining a single concession from Yanqui ( U.S. ) imperialism as the FSLN leadership had promised ! The working people I met in Nicaragua in 1986 during the war against the U.S.-backed counterrevolutionary terrorists were ready to make whatever sacrifice necessary ( and they were doing so ) in defense of THEIR workers and farmers government that then was in power, under the leadership of the Sandinista Front, that was still a revolutionary leadership then. The Nicaraguan people were betrayed by their leaders, who had and have to this day more faith in capitalism then confidence in the workers. The lessons of the degeneration of the FSLN and the defeat of the workers and farmers government that is treated in this book are based on the experience of of a revolutionary workers party in the U.S. defending that revolution here and opposing the U.S. dirty war, and on the socialist journalism of its permanent bureau in Managua during the ten years of the revolution. These lessons are just as important as the lessons of the victorious Cuban revolution , also covered in thumbnail sketches here .We workers and farmers here in the U.S. can still learn much from the FSLN during its revolutionary period, as we can learn from the works of comandante Carlos Fonseca, founder of the FSLN, on the road to power, referred to throughout this valuable book.

El ocaso de la revolución nicaragüense ni fue inevitable, ni fue porque la falta de la conciencia política de los obreros y campesinos nicaragüenses, ni tampoco porque los mismos trabajadores se dejaron engañar por el hambre y así votar a favor de la representativa de los ricos. No, no fue así. El liderazgo del Frente Sandinista con su política de "concertación" con los capitalistas domésticos de la ciudad y del campo desmoralizó al pueblo trabajador, y aún así no ganaron ¡ni una concesión de los imperialistas yanquis como prometió el mismo liderazgo del FSLN al pueblo nicaragüense! El pueblo trabajador que yo encontré en Nicaragua durante la guerra con la "contra" en 1986 estaba dispuesto a sacrificar cualquier cosa en defensa de SU gobierno obrero y campesino nicaragüense como existió entonces, de bajo del liderazgo del FSLN,que fue un liderzgo revolucionario entonces. El pueblo fue traicionado por sus propias dirigentes que tenían y tienen hasta hoy más fe en el capitalismo que confianza en los trabajadores. Las lecciones de la degeneración del FSLN y la derrota del gobierno obrero y campesino que se trata en este libro son basadas en las experiencias de un partido revolucionario obrero en los EE.UU. que defendió a la revolución a través de su periodismo socialista con un buró permanente en Managua durante todos los años de la revolución. Las lecciones son de igual importancia que las lecciones de la victoriosa revolución socialista en Cuba. Todavía nosotros, los trabajadores aquí en Norteamérica podemos aprender mucho del curso del FSLN en su época revolucionaria, como también podemos aprender de la obra del comandante Carlos Fonseca, fundador del FSLN, sobre el camino al poder, que también se incluye aquí.

He encontrado en las revistas de política y teoría marxista Nueva Internacional una fuente indispensable de información, análisis y orientación política. Como indica su título, las revistas de dedican a educar y forjar una nueva vanguardia de la clase obrera a nivel mundial. Bien vale el tiempo necesario para leer y estudiarlas y compartir los artículos con otros trabajadores. Este número ofrece un análisis a fondo de la revolución sandinista en Nicaragua, presentando documentos adoptados por el Partido Socialista de los Trabajadores en el curso de la revolución. Su propósito era explicar la revolución y orientar a militantes y activistas a defenderla contra los ataques del imperialismo norteamericano. Para mí --igual de muchos de mi generación-- la revolución nicaragüense fue muy importante e inspiradora, y este libro me ayudó mucho en entender y aprender de la experiencia. Explica el desarrollo de un gobierno revolucionario de los trabajadores y campesinos, de la lucha por tumbar la dictadora somocista, y del comienzo de luchas anticapitalistas y en contra del dominio norteamericano en la región. Analiza la reforma agraria, indispensable para forjar una duradera alianza obrero-campesina; y el proceso de autonomía de los pueblos indígenas de la Costa Atlántica-- incluso la rectificación de errores iniciales cometidos por la dirigencia sandinista. Son imprescindibles las explicaciones del las raíces de la caída del gobierno revolucionario en su negativa a finales de los 1980s a luchar contra el poder económico de los capitalistas, y la subsiguiente desmoralización de muchos obreros y campesinos revolucionarios.

This book is the most complete political analysis of the Nicaragua's Sandinista Revolution, not for academics, but for working revolutionists, for workers, peasant and youth who want to change the world. It contains resolutions on Nicaragua adopted by the Socialist Workers Party starting in 1979, the historic Program of the Sandinistas by the FSLN's historic founder Carlos Fonseca, and several important articles and speeches by SWP leaders. Most unique are the fifty-page introduction by SWP leader Steve Clark and the articles by Larry Seigle, a leader of The Militant's bureau in Managua during the revolution. They document that the revolution failed, not because it was anticapitalist, but because it failed to go on to end capitalism.

The July 1979 triumph of the Nicaraguan revolution showed the way forward for fighting workers and farmers throughout the Americas and the world. It transformed the possibilities for revolutionary struggles in Central America and the Carribean...attracted a new generation of fighters in the United States to communism...interwined with the rising freedom fight in South Africa...and gave impetus to new advances by the socialist revolution in Cuba."Only the workers will go all the way" - that battle cry of Augusto César Sandino, leader of the war against the U.S. marines' occupation of Nicaragua in the 1920s and '30s, once again became a line of march for millions.This special issue of New International, based on ten years of working-class journalism from inside Nicaragua, traces the lessons fighters everywhere can learn from the rise and fall of the workers and farmers government in Nicaragua.Nicaragua, Grenada, and Cuba "are three giants rising up to defend their independence, sovereignty, and justice, on the very threshold of imperialism...One must have a sense of history to know what these revolutions mean." Cuban president Fidel Castro March 1980 (from the back cover)