Como en cualquier traves a, cuando Ricardo Mart nez inici con su "diario de viaje", nicamente ten a en la mente que encontrar a historias fascinantes que guardar.Aunque no se imagin hasta qu punto aquellos comienzos que lentamente nos forman o los finales de algo que nos templan, hacen que ese rompecabezas que nos define cambie con cada "tormenta" por la que atravesamos en este viaje que llamamos vida.